La sombra que no me deja: culpa, culpa y más culpa

¿En algún momento has despertado como mamá sin sentirte culpable de algo?

Yo tal vez por algunos minutos pueda vivir libre de culpa, pero en términos generales traigo esa carga a cuestas…

Culpable de que no me salgan las cosas como quisiera con mis hijos, culpable de que no les salgan a ellos a pesar de varios intentos.

Con 4 hijos mi vida esta llena de actividad: despierta a las 5:30… unos minutos más por favor…

Luego ver cómo despertar a cada uno para que por lo menos empiecen de la mejor manera su día: a la de 14 le gusta un masaje suave en los hombros, el de 12 le gusta irse a mi cama a acurrucarse unos minutos, la de 10 mejor le pongo BOHEMIAN RHAPSODY y un “rasca rasca” en la espalda (además de cruzar los dedos esperando que su alta sensibilidad no le afecte “tanto” el día de hoy). ¡Ah, pero no hay que hablar tan fuerte! Para que la de 7 años pueda dormir las máximas horas posibles, ya que aún carga con los “estragos” de haber sido prematura y esperar 2 meses en el hospital en una incubadora… Mas vale que duerma lo más que se pueda para que no quede tan chaparra como su madre JA JA

De ahí hay que ver que cada uno desayune para estar bien nutridos física y emocionalmente. Así empieza mi día muchas veces sintiendo CULPA cuando no los mando al colegio “tan nutridos como hubiera querido”.

Después un rato a la clase de pilates (al menos espero alcanzar la media hora hoy). De ahí córrele a arreglarte para las actividades de hoy. Si me tocó dar curso el día en que alguno de mis hijos salio “medio regañado” me siento tan CULPABLE antes de dar la sesión: ¿Con qué cara voy a hablar con ellos mientras hoy no salieron las cosas tan bien como quisiera?

Llego a la casa y si no hice un menú súper nutritivo o no resulta tan rico como quisiera, también ¡CULPA!

Tareas, clases, baños, cenas, besos, tiempo de calidad… darles todo lo que mis pequeños necesitan y si algo me faltó… ¡CULPABLE!

Al final del día, a veces acabo agotada y también me siento CULPABLE de no poder estar ahí al 100% con mi esposo, escuchandolo y compartiendo.

Entonces me declaro CULPABLE, CULPABLE, CULPABLE…